El ladron

El Ladron.

Hoy guarda tu eterno sonido.
Hoy esconde el estruendo del que siempre haces alarde.
Hoy deja que el dios que subyace en ti emerja.
Hoy vengo a hablar contigo.

La infeliz arena que te complaces en compactar
y que no dejas libre por temor a quedarte solo,
esa arena, es mi amiga, hoy me da la bienvenida,
es mi aliada en amores.
De hoy en adelante no te pertenece mas.

Igual que el ladron he venido a tomar y no a pedir
todas las cosas que te hacen que seas eterno.

Como tu color,
por el cual se desliza mi mirada
trasladandose hasta el infinito cruazndo el horizonte siempre inalcanzable.
Tu brisa y tu calor, que colorean el aire con hipnóticos aromas.
La solemnidad con que te arropas y que inunda mi cabeza con una y mil preguntas anárquicamente disemindadas en los laberintos de mi mente.
Las historias y leyendas que te pueblan y que hacen hablar a los ingenuos.
Los angeles y demonios que conviven en ti y te han tomado por suave morada.
El culto que te rinde el sol y al amor que te tiene la luna seran míos.

He venido por todo eso.
No dejaré nada!
Todo me llevare!
!todo!
Para que seas mortal como yo!
Para que nadie te venga a ver,
para que nadie se acuerdede ti,
para que nadie pregunte por ti,
para que nadie suspire en tu memoria.

A cambio, te dejo mi envidia,
mis mas profundas mezquindades,
y las voces de mi decadenia.

Te dejo tambien, las lagrimas y penas
que me descienden los brazos hasta alcanzar mis manos.
Te dejo mis ropajes miserables que ya no necesitaré
pues me vestire de tu gloria y majestuosidad.
Te dejo la ingenuidad de mi osadia gestada en el vientre mismo de voraz locura.
Te dejaré mis manos, pues son para construir y los eternos no construimos con las manos.
Te dejaré todo lo desleal, me llevaré todo lo demas.
Y cuando me vean pasar diran:
"ese que va ahí, es el que se robo el mar"

eoz.